El Loco fue por primera vez a ver a Boca tras su retiro y tuvo su ovación, entra tantas otras.
La semana pasada había hablado en la previa del partido contra Banfield, opinando que sin dudas Boca se iba a llevar el campeonato. Lo había hecho después de votar en la carpa, el día en que después hubo título y Angelici fue confirmado como nuevo presidente. Eso sí, no se quedó al partido. Pero esta vez, ya sin la chance de quedar como mufa ante un traspié, Martín Palermo decidió ir a uno de los palcos a disfrutar de la fiesta en la Bombonera.
Desde ahí arriba, el Loco vio cómo amigos como Schiavi daban la vuelta con sus chicos. Vio la primera gran alegría de Boca después de su retiro, en junio. La última vez que había vivido una fiesta en la Bombonera había sido el día de su retiro, contra Banfield. Aquella noche en la que se emocionó a full y como retribución, el club le regaló un arco de la cancha.
f= Ole
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