El partido arrancó disputado en el medio, con un Boca algo dormido y que llegaba tarde a las pelotas divididas. Algo raro en el equipo de Julio César Falcioni, que siempre se caracterizó por arrancar mejor y más metido en el partido que el rival.
A los 7 minutos llegó el baldazo de agua fría, tras un centro desde la derecha. Pavone apareció sólo y, tras una gran atajada de Javi García, puso el primero. Luego del gol apareció el Boca que nos tiene acostumbrado en este verano: el que corre, que no da una pelota por pérdida y el que siempre intenta jugar.
Y si hablamos de las costumbres tenemos que hablar de Martin Palermo. El delantero marcó el empate tras una floja respuesta del arquero de River Chichizola. Cuando no Martín marcando frente al eterno rival, un goleador que siempre aparece.
Después del empate el partido se emparejó y por momentos fue muy trabado. El Xeneize siempre intentó llegar con pases cortos y cuando no se pudo con centros. Casi en el final de la primera etapa lo tuvo Caruzzo: el defensor recibió un gran centro de Mouche y sólo la tiró por arriba del travesaño. Así se fueron los primeros 45 minutos, con un Boca que empezó dormido pero que terminó superando al rival.
En el segundo tiempo las cosas fueron muy distintas, los dirigidos por Falcioni arrancaron con todo. Primero lo tuvo Mouche, quien tras un centro de Clemente no pudo definir bien. Más tarde apareció el gran goleador que, tras una gran jugada, no pudo definir con fuerza.
Somoza y Rivero se hicieron patrones del medio y así Boca metió a River en un arco. Si a eso le sumamos la movilidad de Chavez y de Colazo, podemos decir que ahora si apareció el equipo del verano.
El partido se hizo trabado, pero River no inquietaba a Javi García. Caruzzo e Insaurralde fueron la muralla que el DT quiere. Por es al equipo se lo notaba tranquilo, sabiendo que en cualquier momento llegaba el desnivel o por lo menos sabía que iba a ser muy difícil que le marquen un gol.
Los minutos corrieron y el partido se fue apagando. Pero Boca, con el empate, se quedó con la Copa Revancha en Mendoza, tras haber ganado el Superclásico en Mar del Plata el pasado 22 de enero 2 a 0. De esta manera, el Xeneize cerró un excelente verano, con tres victorias y un empate, y con un sólo gol en contra. Ahora a esperar el 13 de febrero para ir a la Bombonera y alentar en el debut del Clausura.
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